Una iniciativa que nace por mi afición a escribir microcuentos, y el amor por la fotografía.
¡Espero que lo disfruten!

(Si quieres que escriba sobre alguna fotografía significativa para ti, envía un correo a contacto@carolinacadiz.com)

Machi.

Machi de la araucanía

Toda la vida reflejada en su rostro, la inocencia marcada de sus ancestros, matices de herencia morena sobre sus mejillas.

Agradeciendo los secretos del alma, sonríe unida a la tierra fértil por sus manos trabajadoras, el agua nutriente de vida, y el consejo del árbol sagrado que ruega al cielo para que moje la siembra y aleje todo calcu de sus brotes.

Mujer consejera de raíces, sonrisas amables de timidez sureña, que sobrevive en un mundo de indiferencia agria, con la luz blanca de su sabiduría. #fotocuentos

Fotografía de Hugo Espinosa
Machi Comunidad Loncomahuida, Región de la Araucanía.

 

Guardacostas.

No había duda, él era el dueño de aquel lugar. Nadie conocía la playa mejor, ni disfrutaba como él cuando llegaban los veraneantes para que le dieran comida. Corría vigilante por la orilla, esquivando las olas, ahuyentando las gaviotas que se posaban en busca de alimento, era su entretención, y también, parte de su rito de dominio.

Se le enredaban los pelos con la arena, olfateandocada paso, descubriendo cada grano de arena con su nariz mojada.

A veces aparecían otros perros con sus dueños, todos limpios y respingones, luciendo sus collares de perros dominados, él no se intimidaba, pues la libertad corría por sus venas. Era feliz tomando sol en las rocas, saltando sobre las pulgas de mar, respirando ese aire que lo había visto crecer.

Cuando llegaba el invierno era más difícil, pero la señora Luisa le daba un pedazo de tierra en el patio con una frazada antigua para dormir, él a cambio de su generosidad, la defendía con ahínco cuando iba a la feria.

Cada tarde volvía a su mar, para disfrutar la lluvia y mirar el horizonte, sabía que nadie más podía sentirse tan dueño de su tierra como él. #fotocuentos

Fotografía: Rodrigo Balladares
http://www.flickr.com/photos/dizzlecciko/
Texto: Carolina Cádiz

Esa tarde de verano.

Ella impaciente, miraba la hora cada minuto, esperando llegar a tiempo a su encuentro. Él la esperaba desde mucho antes en la escalera, frente a la salida principal.

Salió nerviosa, mirando a todos lados, sin reconocer su rostro entre la multitud… De pronto, él se acercó, la miró con dulzura, y se saludaron sonriendo, tímidos, con mucha ansiedad. Luego de varios meses hablando, noches en vela contándose la vida a través del computador, hoy se miraban a los ojos con el corazón latiendo fuerte, y las manos nerviosas, esperando aprobación para ese abrazo pendiente.

Fue una noche mágica, con todo el ritmo de una pieza musical, sinceros y alegres, comenzaron a encontrarse en profunda intimidad. #fotocuentos

Fotografía por Diego Haristoy @didecus
http://www.flickr.com/photos/didecus/6297055472/in/set-72157626670611750/
Texto: Carolina Cádiz.

Regreso.

El viento helado penetrando su nariz, aroma a leña, estelas de humo a lo lejos anunciando su llegada. Recuerdos de infancia grabados junto a la memoria de su madre. Una lágrima sobre las mejillas azoradas, cristalizándose en el mar intenso de su tierra.

El transboradador se acercaba despacio a la orilla, esperaba un reencuentro postergado por más de 15 años, un espacio perdido que hoy debía enfrentar, era el momento de hacerlo.

Cerró sus ojos un momento, sintió el sonido del agua chochando contra el lanchón, sus manos húmedas, suaves, no como cuando vivía aquí. Recordó los días de invierno jugando bajo la lluvia, mamá llamándolo a comer tostadas de pan amasado. Sonrió, quizás porque descubrió con los años que ese lugar tan lejano y tranquilo, sí era su hogar. #fotocuentos

Fotografía por Francisco Valdes Lagos.
@CAMAFE0
Texto: Carolina Cádiz.

Renacer.

En silencio, bajo el naranjo retorcido de sus lentes, observaba este tiempo tan anhelado. Recordaba la miseria que le inundó por años, esperando ese momento de libertad.

El movimiento de los transeúntes junto a sus maletas añejas, los gritos de sus nietos, el ruido de los aviones, todo eso era felicidad que agolpaba su pecho.

Tomó el reloj heredado en sus manos, lo apretó con fuerza, y lo dejó junto a un asiento. Lo abandonó, como hace años debió hacerlo, sintiendo la paz de entregar su dolor a este renacer, a este nuevo camino donde encontraría la vida. #fotocuentos

Fotografía por Diego Haristoy.
http://www.flickr.com/photos/didecus/
Texto: Carolina Cádiz.

Otoño.
Una pequeña brisa se colaba por su cabello, olía a madera con unos toques de albahaca, rocío y jazmín. El alba despuntaba ligero, las pequeñas ramas desnudas se golpeaban unas con otras como bailando al ritmo del viento, ella sonreía. El sol acaramelado iluminaba su rostro. Era momento de correr, no podía desperdiciar ese momento, no otra vez. #fotocuentos

Fotografía por David Gysel
http://www.davidgysel.com/
Texto: Carolina Cádiz.

 

pensamientos de 5 \"Fotocuentos\"

  1. Mil felicitaciones por esta idea ;) Soy fotógrafo y me gustaría compartirle algunas imágenes e ideas para desarrollar estos fotocuentos. Me pondré en contacto por el correo señalado al principio.Gracias……..

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